Jesús Aller | El
asturmexicano Paco Ignacio Taibo II ha cultivado la historiografía y la
literatura de creación, pero tampoco se ha resistido a mezclar dosis de una y
otra en libros mestizos que tratan de explorar, más allá de los hechos
probados, la trama de momentos cruciales.
Arcángeles.
Doce historias de revolucionarios herejes del siglo XX (Traficantes de
sueños, 1998), con su sólida base historiográfica, pertenece al primer grupo y
sólo pocas veces echa a volar la imaginación buscando respuestas para alguno de
los enigmas que plantean los datos. Se trata de una colección de biografías
anudadas por el afán de mostrar que ese siglo XX que tan mal nos ha dejado
tenía potencial humano, por debajo de los oropeles de la gran historia oficial,
para mucho más de lo que fue. Los elegidos, como vamos a ver, son todos
revolucionarios que a pesar de profesar ideologías diversas, tienen un aire de
familia. Este tal vez proceda de que todos ellos, en un momento clave, hicieron
caso más a su corazón que a los centros y estructuras de poder y, fieles a su
intuición, con la “maravillosa terquedad” que el autor del libro