
En la sección «Instrucciones de uso» describimos las experiencias que a la fecha hemos tenido con PolyluxMarx en la formación política, ya que la historia del material que tienen en sus manos hoy alcanza una década de vida: si bien su origen parte de los grupos de trabajo informales que promovieron estudiantes críticos, desde hace varios años la Rosa-Luxemburg-Stiftung ofrece regularmente cursos de lectura de El Capital de Marx. Como fundación cercana al partido Die Linke (La Izquierda), la Rosa-Luxemburg-Stiftung, al igual que las demás fundaciones políticas alemanas, tiene la posibilidad y el cometido social de ofrecer programas educativos en diferentes formatos fuera de los ámbitos escolar, universitario y laboral. De ahí que resulte lógico que PolyluxMarx se haya gestado en los cursos anuales de lectura de El Capital (http://www.das-kapital-lesen.de ), impartidos por facilitadores y facilitadoras para que las personas que asistan discutan de manera colectiva un determinado pasaje previamente leído en sus reuniones semanales.
No obstante, la formación política puede llevarse a cabo en
muchos lugares como asociaciones, organizaciones no gubernamentales, grupos
políticos, casas particulares o universidades. Y es en estos lugares donde PolyluxMarx también ha acompañado la
lectura de El Capital, ya que en
solitario no es muy divertida y a veces resulta incluso un poco pesada.
Es por eso que PolyluxMarx
se dirige sobre todo a los facilitadores y facilitadoras; pero también a las y
los estudiantes, trabajadores, activistas políticos y personas –jóvenes o
adultos– con formación académica o sin ella, lo mismo que con conocimientos
previos teóricos o sin ellos.
Es cierto que las posibilidades, los lugares y las
condiciones para llevar a cabo la formación política varían de país en país, al
igual que las interpretaciones en torno a El
Capital de Marx. Todo ello obviamente repercute en PolyluxMarx. Sin embargo, no queremos limitarnos a presentar
únicamente un material educativo probado en la práctica: también queremos
contribuir al debate internacional en torno a Marx. Ésta es la razón por la que
preferimos emplear métodos particulares, por lo que confiamos puedan discutir y
usar este material en sus propios contextos conforme a sus necesidades.
Para terminar vale la pena una aclaración: PolyluxMarx no es una introducción a El Capital ni tampoco sustituye su
lectura. Agradeceremos nos compartan sus experiencias, críticas y sugerencias.
El equipo PolyluxMarx
| Berlín, febrero de 2014
Prólogo
Valeria
Bruschi, Antonella Muzzupappa, Sabine Nuss, Anne Steckner & Ingo Stützle

En el año 2003, cuando ofrecimos por primera vez un curso
sobre El Capital en la Universidad
Libre de Berlín, aún no se vislumbraba este renacimiento. En aquel entonces
quisimos contraponer algo al desplazamiento que la universidad estaba haciendo
del análisis marxiano. Tres años después continuamos con los cursos de lectura de
El Capital; esta vez con el amparo de
la Rosa-Luxemburg-Stiftung. Más de 40
personas, en su mayoría jóvenes, asistieron a la primera reunión en nuestras
oficinas. La crisis financiera de 2008 le dio un nuevo impulso al interés en El Capital. En la primera sesión de ese
año se duplicó el número de participantes. Un periodista del influyente diario
conservador alemán Frankfurter Allgemeine
Zeitung, quien más bien por casualidad fue a parar al salón repleto, quedó
tan impresionado que al día siguiente lo mencionó en un artículo. Era la época
en la que Peer Steinbrück, ministro federal de Hacienda de Alemania en ese
tiempo, comentó que «efectivamente, algunas
partes de la teoría marxista después de todo no están tan equivocadas». Fue
cuando la agencia de prensa Associated Press
escribió que durante la crisis financiera los alemanes buscaban «consuelo en Marx» y cuando Tokio TV quiso
filmar los círculos de lectura de El
Capital en las oficinas de la Rosa Luxemburg-Stiftung.
Entretanto, la lectura de El Capital se ha convertido en parte integral de la oferta
educativa de la Rosa-Luxemburg-Stiftung.
Cada año se inscriben unas cien personas interesadas en los cursos y se reúnen semana
tras semana para debatir sobre El Capital.
Pero tampoco hay que pintarlo de color de rosa: la lectura de los tres tomos
comprende unas dos mil páginas y a veces es todo menos fácil. El lenguaje es
extraño, el análisis es complejo y el libro —a pesar de toda su actualidad—
está situado en el siglo XIX. Tanto más importante nos parecía ilustrar algunos
conceptos y pautas argumentativas con diapositivas en PowerPoint. En la práctica de los años surgió así una gran variedad
de diapositivas. Cada vez con mayor frecuencia nos pedían que las subiéramos a
la red. Pero cualquiera que usa PowerPoint
sabe: las diapositivas solas, sin explicación, terminan siendo «prosa
enumerada» y su significado contextual se pierde, por lo que hace dos años
decidimos elaborar una compilación comentada de diapositivas: PolyluxMarx.
Así como fue de fácil la decisión, igual de difícil fue su realización. Cada
comentario, cada concepto, cada ilustración se sopesaron y debatieron para ver
cómo lo sintetizábamos. En particular, agradecemos a Michael Heinrich, quien
nos apoyó pacientemente una y otra vez con sus sugerencias y comentarios
durante todo el proceso de edición del material educativo; además de ser autor
del libro Crítica de la economía
política. Una introducción a El Capital de Marx, publicado en español por
la editorial Escolar y Mayo en 2008. También agradecemos los diversos apoyos de
Lutz Brangsch y Rolf Hecker; a Juliane Bräuer por su
paciencia durante la
realización gráfica; a Bernd Brouns por los trabajos de reproducción durante
las arduas sesiones de trabajo; a Moritz Zeiler por la revisión editorial; y a
Markus Euskirchen por sus ilustraciones (páginas 23, 108 y 117). Claro está que
la responsabilidad de errores, simplificaciones y otros defectos recae
únicamente en nosotr@s.